La noche en la Bombonera tuvo un sabor especial para Miguel Ángel Russo, que no solo celebró el segundo triunfo consecutivo de su equipo, sino también su primer festejo en la Ribera desde su regreso al banco de Boca. Con una sonrisa y la tranquilidad del deber cumplido, el DT valoró lo conseguido. “Sí, estoy muy feliz. Era muy necesario no sólo para mí, sino para los chicos. Pero tenemos que seguir mejorando”, aseguró.
El entrenador destacó que la victoria tuvo pasajes de buen fútbol que marcan el camino a seguir. “Creo que suma mucho, fue importante el nivel de juego en muchos momentos del partido. Tenemos que seguir así siempre. El triunfo dejó muchas cosas buenas. Tuvimos rendimientos muy importantes”, analizó Russo, que se mostró conforme con lo hecho por sus dirigidos.
Uno de los puntos más llamativos del encuentro fue el doble nueve con Cavani y Merentiel, una decisión que Russo defendió con firmeza. “Son formas que tenemos de jugar. Estamos trabajando bien con los chicos pensando en lo que viene. Venimos hablando mucho con él, con Merentiel, con todos los chicos que son los nueves”, explicó. Y lejos de alimentar las críticas, respaldó a Cavani pese a su sequía previa: “Forma parte de todo este juego”, sentenció.
Sin embargo, lo más fuerte llegó en el cierre de sus declaraciones, cuando Russo se rindió a los pies de su máxima figura: Leandro Paredes. “Significa mucho en todos los niveles. Es un líder, en la Selección también. Tiene una categoría que es distinta. Por suerte lo tenemos en Boca porque está a un nivel muy alto”, elogió al campeón del mundo, que volvió a ser la bandera futbolística de su equipo.
El triunfo no solo significó un envión en la tabla, sino también una muestra de carácter y confianza para un plantel que empieza a encontrar su mejor versión bajo la conducción de Russo, con figuras que marcan diferencias en momentos clave.
