Mientras Boca continúa ajustando su plantel para el segundo semestre, Miguel Ángel Russo ya tomó una decisión contundente con varios jugadores. Uno de ellos es Simón Rivero, quien no fue incluido en la lista de 35 futbolistas que viajaron al Mundial de Clubes y quedó al margen de la consideración del cuerpo técnico.
El volante de 22 años regresó al club luego de su préstamo en Unión, pero durante la competencia internacional se entrenó por separado en Boca Predio junto a un preparador físico de las divisiones juveniles. La señal fue clara, y ahora ya es oficial: Russo le comunicó que no será tenido en cuenta.
Rivero debutó en Primera en 2022 frente a Vélez y sumó apenas otro partido más ante Aldosivi. Con contrato vigente en el Xeneize hasta diciembre de 2026, su futuro inmediato parece estar fuera del club. Aunque no hay una definición formal, todo indica que volverá a salir a préstamo.
Por estas horas, Platense y Tigre son los dos clubes que lo tienen en carpeta. Ambos están interesados en sumarlo por un año, aunque su situación contractual podría abrir otra puerta: si se va cedido nuevamente, cuando regrese le quedarán solo seis meses de vínculo, lo que le permitiría negociar su salida como jugador libre.
Mientras se define su destino, en Boca ya saben que Rivero no será parte del proyecto deportivo actual, y su salida es inminente. Otra baja silenciosa que marca el rumbo del recorte de plantel que encabeza Russo.
