Han pasado casi 25 años de uno de los logros más recordados por los hinchas de Boca, pero la memoria de aquella hazaña sigue viva tanto para los xeneizes como para sus rivales. La final de la Copa Intercontinental 2000 en Japón, en la que el equipo de Carlos Bianchi venció al poderoso Real Madrid con un doblete de Martín Palermo y una actuación inolvidable de Juan Román Riquelme, marcó un antes y un después en la historia del club.
Uno de los protagonistas de aquel encuentro fue Claude Makelele, quien tuvo la difícil tarea de seguir de cerca a Riquelme en el mediocampo. Años después, el ex volante francés rompió el silencio y se refirió a ese partido en una entrevista con Radio La Red. “Claro, es un gran jugador. Lo sufrí”, reconoció el exjugador del Merengue. Aunque también, con una sonrisa, agregó: “Él también sufrió”, en alusión a la dureza con la que intentó contener al ídolo xeneize durante los 90 minutos.
Makelele, que tuvo una carrera brillante en Europa con pasos por Real Madrid, Chelsea y PSG, también se tomó un momento para hablar del fútbol sudamericano. Desde Estados Unidos, donde presenció el reciente Mundial de Clubes, elogió la esencia del juego en esta parte del mundo: “Aprendí con mi padre que este lado del fútbol es de placer, de familia. Es de amor. Siempre me gustó”. Además, recordó sus enfrentamientos con equipos argentinos, destacando especialmente su cruce con Boca Juniors.
La final en el Estadio Olímpico de Tokio quedó grabada en la historia grande del Xeneize, pero también dejó marcas en aquellos que la padecieron. “Tengo mucho respeto por Boca”, cerró Makelele, quien vivió en carne propia lo que fue medirse ante un equipo que hizo historia a base de fútbol, personalidad y corazón.