La crisis futbolística de Boca no solo se refleja en el presente del equipo, sino también en la preocupante estadística que acumula Miguel Ángel Russo al frente del plantel. Sumando sus dos etapas como entrenador, el DT lleva 15 partidos consecutivos sin conseguir una victoria oficial, una racha que expone las dificultades que atraviesa el club en todos los aspectos.
Tras su regreso antes del Mundial de Clubes, Russo había despertado ilusiones por la posibilidad de reordenar un equipo que venía en caída. En aquel certamen internacional, el Xeneize mostró señales de orden y buen juego, pero esos avances fueron efímeros y quedaron eclipsados con el inicio del torneo local, donde el equipo no logró imponer su juego ni resultados.
Actualmente, en este tercer ciclo de Russo, el técnico registra siete partidos sin ganar: cuatro empates y tres derrotas que apenas aportaron puntos. Sumando los últimos ocho encuentros de su etapa anterior, donde tampoco celebró triunfos, la racha negativa alcanza un total de 15 compromisos oficiales sin victorias.
La última alegría bajo su conducción fue en mayo de 2021, cuando Boca goleó 3-0 a The Strongest en la Bombonera durante la fase de grupos de la Copa Libertadores. Desde ese día, el equipo ha transitado un camino complicado que aún no pudo cambiar, con un entrenador que debe buscar urgentemente respuestas para revertir esta situación crítica y dar vuelta la página.
El futuro de Russo en el club comienza a ser un tema de debate, mientras Boca necesita resultados que devuelvan la confianza a jugadores, cuerpo técnico e hinchas.
