En medio de uno de los momentos más complicados de la actual gestión, en el Club de la Ribera avanza el plan para incorporar una nueva figura que lidere el área de fútbol. Desde Boca Predio aseguran que “en estos días tiene que haber novedades” y que la búsqueda se enfoca en un nombre fuerte, capaz de renovar el clima interno y aliviar la presión que hoy recae sobre la conducción.

La salida de Raúl Cascini y Mauricio Serna, sumada a la ausencia del Patrón Bermúdez por cuestiones personales desde hace ya un tiempo, dejó a Marcelo Delgado como único integrante del Consejo de Fútbol. Sin embargo, la idea es que el Chelo continúe, pero dentro de una secretaría técnica encabezada por un mánager de peso que se convierta en la cara visible del proyecto.
El arribo de este nuevo referente podría traer un cambio no solo en la imagen institucional, sino también en la forma de tomar decisiones. Quedará por verse si tendrá mayor autonomía para coordinar con el cuerpo técnico y definir movimientos clave, como la llegada de refuerzos o la elección de un nuevo entrenador en el futuro, o si seguirá el esquema presidencialista que caracteriza a Juan Román Riquelme.
Los tres candidatos

En medio de esta búsqueda, comenzaron a aparecer nombres propios que seducen a la dirigencia. Uno es Carlos Fernando Navarro Montoya, quien ya trabajó como coordinador de Inferiores en el inicio de la actual gestión y mantiene una relación cercana con Riquelme. Otro es Alberto Márcico, que pese a haber acompañado a la oposición en las elecciones, se acercó en los últimos meses y hasta se mostró dispuesto públicamente a ocupar un cargo.
También está sobre la mesa José Pekerman, histórico entrenador y uno de los preferidos de Riquelme a lo largo de su carrera. El ex DT de la Selección argentina en el Mundial 2006, actualmente sin trabajo, fue varias veces candidato a dirigir al Xeneize y hasta participó como técnico invitado en la despedida de Román. Su nombre genera expectativa por su experiencia y su peso dentro del mundo del fútbol.
En los próximos días se esperan definiciones y todo indica que el anuncio no se hará esperar. Boca quiere dar un golpe de timón en la conducción futbolística y el nuevo mánager podría ser la primera gran pieza de un cambio mayor.